lunes, 28 de enero de 2013

"El lado bueno de las cosas" y "El vuelo". Dramas de diverso alcance

Hoy voy a hablar de dos películas que he tenido la oportunidad de ver este fin de semana y que han satisfecho mis expectativas, de esas que son recomendables sin ser una maravilla. Hablo de "El lado bueno de las cosas" y "El vuelo".

Tras pasar ocho meses en una institución mental por agredir al amante de su mujer, Pat (Bradley Cooper) vuelve con lo puesto a vivir en casa de sus padres (Robert De Niro y Jacki Weaver). Determinado a tener una actitud positiva y recuperar a su ex-mujer, el mundo de Pat se pone del revés cuando conoce a Tiffany (Jennifer Lawrence), una chica con ciertos problemas y no muy buena fama en el barrio. A pesar de su mutua desconfianza inicial, entre ellos pronto se desarrollará un vínculo muy especial que les ayudará a encontrar en sus vidas el lado bueno de las cosas.



"El lado bueno de las cosas" es lo nuevo del director David O. Russell, un realizador que dio que hablar en los 90 con películas como "Flirteando con el desastre" y "Tres reyes" y que acabó siendo más conocido por su mal humor en los rodajes y sus peleas con los actores, hundiéndose en películas de difícil digestión como "Extrañas coincidencias". Con la reciente "The fighter" recuperó el favor de la industria y ahora ha pasado a ser un aseado director de propuestas hollywoodienses con un cierto deje de película hecha para el festival de cine independiente de Sundance, como es el caso de ésta que nos ocupa.



Su nueva cinta es una de esas películas destinadas a dejar un buen sabor de boca en el público, con una rareza aparente que esconde lo mismo que hemos visto tantas veces. Aquí los protagonistas son una serie de personajes con una serie de pedradas mentales, cada uno con sus manías y sus fobias particulares, que tratan de encontrar su lugar en el mundo y que se dan cuenta de que incluso los que parecen más normales tienen sus rarezas o que ellos lo que necesitan en el fondo es a gente que les iguale en actitudes curiosas. Todo ello con una estructura de comedia romántica de chico conoce a chica, que sigue los esquemas habituales de este género, aunque queriendo dar un toque realista, menos petardo que si estuvieran por ahí Julia Roberts o Sandra Bullock.



Uno de los puntos fuertes de la película son sus actores, todos ellos defendiendo con convicción sus personajes. Bradley Cooper demuestra que sabe hacer algo más que lucir talle, Robert DeNiro no llega al de sus mejores épocas, pero está por encima de muchos de los papeles cutres que ha hecho últimamente y la que está realmente bien es Jennifer Lawrence, una chica que apareció de repente cuando fue nominada hace dos años al Oscar  por "Winter´s bone" y que se ha hecho famosa por sus intervenciones en la última entrega de la saga "XMen" y por "Los juegos del hambre". Una chica guapa y con cuerpazo (y unos lunares que me encantan) y que demuestra tener magnetismo ante la cámara. Alguien que si tiene suerte y sabe elegir sus papeles puede seguir dando que hablar.


Con todo ello, nos encontramos con un filme agradable de ver, que está acertado en su mezcla de comedia y drama, pero que a buen seguro será sobrevalorado. El que haya sido nominada a 8 Oscar de la Academia es una muestra de lo lejos que llegan las películas producidas (y los actores que salen en ellas) por Harvey Weinstein en estas lides (recordemos "Shakespeare enamorado", "Las normas de la casa de la sidra", "Chocolat", "Vicky Cristina Barcelona" o "El discurso del rey", entre muchas otras). Algunas de ellas son buenas películas que acaban siendo propulsadas más allá de lo que se merecen gracias al buen vender de su productor ejecutivo, que se mueve como pez en el agua por los entresijos de Hollywood.

La otra película, que no se ha vendido tan bien en la temporada de premios, salvo para su actor principal, es "El vuelo", lo nuevo de Robert Zemeckis, después de 12 años alejado de las películas de imagen real (tras la espléndida "Náufrago", se emperró en hacer cintas animadas con captura de movimiento y así hizo "Polar express", "Beowulf" y "Cuento de Navidad", hasta que parece haberse cansado del invento).

Tras un aterrizaje de emergencia gracias al cual salvan la vida un centenar de pasajeros, el capitán Whip Whitaker (Denzel Washington), que pilotaba el avión, es agasajado como un héroe nacional. Sin embargo, cuando se pone en marcha la investigación para determinar las causas de la avería, se descubre que, probablemente, fue precisamente el piloto quien puso en peligro la vida de los pasajeros debido a su alcoholismo.



Reconozco que he tenido una sensación rara viendo esta película, que me ha parecido una curiosa mezcla entre cine al estilo Hollywood y telefilme de sobremesa. Algo en ocasiones muy interesante e incluso brillante y algo a veces conservador y pueril, digno de un principiante timorato. Zemeckis fue considerado durante años una especie de Spielberg menor, por el apadrinamiento del Rey Midas de Hollywood en los inicios de su carrera y películas tan spielbergianas como la saga "Regreso al futuro". En los 90, Zemeckis pareció seguir una mayor madurez, con cimas como "Forrest Gump", "Contact" o la citada "Náufrago", hasta que dio el paso atrás con esas otras películas de animación ya comentadas. "El vuelo" no viene a ofrecer nada nuevo ni deja claro si a Zemeckis se le ha pasado el arroz o si vuelve a despertarse al mundo real tras años perdido en la animación.



Aquí nos cuenta la historia de un tipo adicto al alcohol y a las drogas, que llega a trabajar borracho y que tiene el talento suficiente como para salvar de la muerte a casi todos los pasajeros de un avión. Alguien muy bueno en lo suyo, pero lleno de problemas en la vida real. La secuencia del accidente demuestra que el gran espectáculo en una sala de cine no depende tanto de destrozar todo lo que se pueda, sino de inyectar emoción en lo que se cuenta y hay reconocer la maestría de Zemeckis en esa parte del filme, que engloba más o menos los primeros 20 minutos de la película.



Lo que viene a continuación es una especie de película sobre la superación de los vicios de este hombre, un camino en el conocerá a una joven drogadicta (Kelly Reilly), que le ayudará a tratar de superar sus adicciones. Y al mismo tiempo se desarrolla otra trama en la que el protagonista puede ser imputado por conducir borracho el avión estrellado, pese a salvarlo. Todo ello en una mezcla a ratos interesante, a ratos indigna de quien dirige. Cabe destacarse la labor de Denzel Washington, uno de esos actores que no dejan de ser ellos mismos hagan lo que hagan, pero que lo hacen bien y saben llenar la pantalla. Tampoco quiero olvidarme de Kelly Reilly como la yonqui que acompaña a Washington y del siempre efectivo John Goodman como "camello", que hacen lo mejor que pueden unos personajes que merecían más líneas y desarrollo en el guión.



Así pues, esta es una película interesante, visible, pero que está lejos de pasar a los anales del cine. Esperemos que sirva para desengrasar a Zemeckis y que la próxima sea aún mejor. Una película que espantará a los que vayan pensando que van a ver un gran espectáculo, pues éste está concentrado únicamente en los primeros minutos, mientras el resto del tiempo nos hallamos ante un drama intimista.

Dos películas que conectarán de diversa forma con el público y que quizá el tiempo pondrá en su sitio, como suele ser habitual.

7 comentarios:

  1. Las dos las queria ver y después de tu critica sigo qureriendo verlas :)
    Aunque no sean peliculones creo que me gustaran.
    Estas viendo antes de la gala todas las que estan nominada?

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    1. "El lado bueno de las cosas" me gustó y creo que te podrá gustar, es de esas pelis que saben conectar con el público. La de "El vuelo" va a crear más opiniones negativas y en algún caso merecidas.

      La verdad es que no es consciente por el tema de los Oscar, pero estoy aprovechando ahora que está la cartelera caliente, con novedades interesantes todas las semanas. Ya vendrá la época de vacas flacas, con estrenos de tercera que me darán más pereza

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    2. La veré este miércoles de del lado bueno. ya te contaré.

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  2. Justamente ayer, en una parada de autobús, vi el cartel de la película "El lado bueno de las cosas". Y no sé si por los personajes, o por la frase de "el amor duele" que hay entre ellos, dije que no me podía quedar sin verla.
    Después de tu crítica, tengo más ganas aún de que llegue el fin de semana para poder verla.

    Un besito.

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    1. Es una comedia romántica con personajes algo peculiares en un principio, que acaban revelándose tan humanos como el resto.

      Pues entonces a verla, a ver si te gusta.

      Otro besito para ti

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  3. Bueno bueno..."El lado bueno de las cosas" quiero verla, la otra no tanto, me tiene pinta de peli de sábado noche, que no es tan malo como de domingo tarde eh? Pero vamos que no me importa perdérmela.

    Te recomiendo "Django desencadenado", ligera, muy romántica y sentimental...o más bien visceral. ;-P

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    1. Jajaja, sí, "El vuelo" no llega a domingo tarde pero entra bien en la categoría de sábado noche, que además fue cuando la vi.

      Pues la de "Django" la vi ya y no la quise comentar por aquí porque no me motivó mucho para hacer una crítica. Se deja ver, pero tiene muchas paridas de esas que harán gracia a Tarantino y sus fans, pero que a mí me dejaron frío. Christoph Waltz y Samuel L. Jackson son de lo mejorcito de esa peli, que abusa de la violencia de tebeo y a veces se hace muy chorra

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